No
hay nada como quitarle un jugador al vecino, sobre todo si es la primera vez en
la historia que eso pasa, claro... Es una efemérides en sí misma. Parece
que Álex Remiro ha
caído en gracia en la Real Sociedad tras
su convulsa marcha del Athletic Club. El
meta navarro ha sido el futbolista más aclamado en el arranque de los
entrenamientos del conjunto de Imanol Alguacil este
lunes en Zubieta. Así que, dado que ni ha debutado en Primera división, algo
tendrá que ver su club de procedencia.
Para
el de Cascante todo va de color rosa. Ni siquiera fija la vista atrás en el año
que se ha pasado en blanco. "Yo estaba tranquilo. Al final, en mi corta
carrera he valorado mis momentos buenos y malos, y estoy seguro que no me
equivoco al venir aquí. No me arrepiento para nada. El periodo de espera ha sido
un poco largo pero seguro que merece la pena", dijo en su presentación en
Anoeta.
El
jugador de 24 años ha estado "muy cercano y cariñoso con los seguidores
realistas", según comentan los compañeros donostiarras. De hecho, ha
sido uno de los más aclamados después de la sesión de trabajo cuando los
futbolistas se han acercado a las gradas de Zubieta para firmar autógrafos,
fotografiarse con los aficionados y hacer las delicias de los más pequeños.
Una
de las anécdotas que ha protagonizado en esta primera jornada se ha producido
cuando un seguidor le ha preguntado de dónde era. "¡Cascante!", ha
contestado el joven portero al que el aficionado le ha deseado mucha suerte
para lo que resta de temporada, diciéndole que eran "paisanos" ya que
él era "de Olite" (Navarra).
Remiro viene de vivir un año en blanco en
Bilbao que le ha servido para curtirse. "Ha sido un año diferente en
el que aparte de prepararme físicamente me he preparado mentalmente con la
ayuda de personas que están capacitadas para el tema psicológico y el control
de las emociones. He mejorado bastante en ese aspecto y tenía muchas ganas de
venir y ponerme a prueba", explicó.
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