Es un torneo que se disputa en el mes de septembre. Un evento futbolístico de pretemporada que ha cogido un auge impresionante por el apoyo que le prestan clubes, federaciones, diputaciones y ayuntamientos entre la meseta castellana y la sierra de Guadarrama donde el clima es más suave en verano y el paisaje de pinos idílico.
Para los chicos de categoría alevín y benjamín entre 10 y 11 años una experiencia fantástica el alternar todo un fin de senana con clubes de la categoría de Valencia, Zaragoza, Barcelona, At. Bilbao, Villarreal, Numancia...que se dieron cita en Tarazona el pasado fin de semana. Junto a esos grandes nombres otros más modestos com Oberena, que nadie de la organización queria que ganra la final estando de por medio el equipo azulgrana de la Ciudad Condal, que le da más renombre y lustre al torneo evidentemente.
Entre frondosos pinares viene dssputàndose este prestigioso evento que me dan ganas de traerlo a Pamplona aunque haya que plantar unas cuantas hileras de pinos en frente de Tajonar. Vean si no el negocio que tiene montado no sabemos quién a la vista de lo que pagan clubes y jugadores por participar en el momento de hacer la inscripción los 32 equipos con una media de 12 jugadores por equipò y una asistencia de unos 5.000 aficionados que suelen pagar uno o dos euros la entrada cada dìa que, eso sì hay que decir, les da opción a participar en el sorteo de un jamón...
Si en Burlada he sido capaz de organizar durante tres años con éxito total un Festival de Habaneras sin mar, ¿por qué no intentar en Pamplona un Pinares Cup sin pinos...? Negocio redondo.
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