DÍAS 15 Y 16 DE MAYO: HOLANDA,
Son peter panes que cambian las mallas verdes por las negras y las campanillas por los cascabeles y las cintas de colores, los cuarentunos se aferran a su guitarra o a su mandolina para que el mañana no toque a su puerta y, a pesar de que ya no cumplirán los cuarenta, puedan seguir bebiéndose la noche y rondando a la luna con la inocencia de la juventud. A eso se dedicarán durante la decimonovena edición del Certamen Internacional de Cuarentunas, que se celebrará por primera vez en Burgos el 15 y 16 de mayo. Catorce formaciones procedentes de Holanda, México, Portugal y el resto de España, países con representación en la Federación Internacional de Cuarentunas, se citarán a orillas del Arlanzón para compartir sus cuitas y contagiar a los burgaleses su alegría.
Cada grupo deberá tener 12 miembros como mínimo -si no los consiguen se juntan varios- por lo que calculan que unos 250 cuarentunos conquistarán la ciudad en primavera.
Aunque el programa aún está por detallar, su boceto dibuja una bienvenida el viernes con una actuación vespertina en el templete del Espolón, que seguiría con una visita a la Alcaldía y una ronda a las reinas de San Pedro para concluir la jornada con una cena. El día grande llegará el sábado 16 con una visita a alguno de los monumentos burgaleses -intentarán que aquellos vestidos de tuno tengan entrada gratuita- y una comida de hermandad, con la celebración de la asamblea anual de la Federación a los postres. La jornada concluirá con el espectáculo en el Teatro Principal, donde sonarán clásicos del repertorio tunero. La noche se prevé larga y colorida.
La Cuarentuna de Burgos, la más joven de España, con diez años de historia y 27 miembros, tomará el relevo de la ciudad holandesa de Eindhoven como anfitriona.
Sus estatutos son blandos y basta tener ilusión por vestir una capa y bailar una pandereta para entrar en ella, que acoge tanto a los que en su día fueron tunos y se resistieron a colgar las cintas cuando abandonaron el campus como a aquellos que nunca lo pisaron y suspiraban por rondar a la vecina del quinto. En esa mezcolanza de perfiles, dicen quienes están dentro, reside el encanto de las dueñas y señoras del Clavelitos.
La Cuarentuna anfitriona del Certamen de Burgos |
ALEGRÍA, MÙSICA Y BUEN HUMOR
Alegría y buen humor, junto con la calidad alcanzada por sus curtidas voces y añejos instrumentos se darán cita en El Teatro Principal de Burgos, que acoge en esta ocasión la celebración de la 19º edición de este espectáculo musical de gran colorido y esmerada puesta en escena, y que año tras año se lleva a cabo en las distintas ciudades y localidades de donde provienen las formaciones que integran la Federación Internacional de Cuarentunas a la que pertenecen, y que congregará en esta ocasión a más de 250 “cuarentunos” (antiguos tunos), que fueran trovadores y juglares por entonces durante sus años de estudiantes y en la actualidad se erigen como herederos y perpetuadores de una tradición secular que se remonta a varios siglos atrás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario