JUVENTUD ACUMULADA
La Rondalla Armonía nació el 3 de mayo 1982. Tiene su sede en El Vergel de Pamplona. Está formada por músicos que en su juventud fueron componentes de importantes grupos, orquestas o bandas de música. Su repertorio está basado en 600 piezas de sabor clásico y moderno, primordialmente pasodobles, habaneras, fragmentos de zarzuela y música relacionada con el folclore y tradiciones navarras como la Jota y estampas regionales, que nunca faltan en sus actuaciones.
Se han subido a los más importantes
escenarios de Navarra: Auditorio Baluarte, Teatro Gayarre, Civicán, Gaztambide
de Tudela, etc. Con salidas a la Rioja,
Tarragona, Cantabria, Castilla, Córdoba, Valencia, Bayona, Aragón… y actuaciones
en estudios de Televisión y Radio Nacional.
El elenco instrumental lo forman: 8
bandurrias, 3 laúdes, 5 Guitarras, 1 guitarrón mexicano y 1 saxofón. El concertino Carlos Irigoyen esta considerado como la mejor púa de Navarra. Tienen en la
voz del tenor Rafael González, de Mirafuentes, con 12 discos grabados, un
exponente destacado de la jota navarra, laureado en los más prestigiosos
certámenes. Además cuenta con la colaboración especial de la soprano Edelweiss
Aller, la revelación del bel canto el pasado verano. Dirige Pedro Mª Montoya.
La recepción en su día de la Rondalla
Armonía en el Ayuntamiento de Pamplona fue un homenaje a la trayectoria musical
del grupo, manifestando que “La Rondalla Armonía es una de las señas de
identidad de Pamplona por su saber hacer y ser la guardiana de las tradiciones
musicales de los instrumentos de cuerda de la Comunidad Foral”.
La Sociedad Navarra de Geriatría le
entregó un galardón como ejemplo de envejecimiento activo y saludable. Y el
Gobierno de Navarra la ha declarado de interés social incluyéndole en el
mecenazgo cultural.
La Rondalla Armonía se presenta el 5
de marzo en el Casino Principal, el 25 de abril en la Casa de Cultura de Burlada
y el 28 de junio en el Auditorio Baluarte para ofrecer unos selectos
conciertos de plectro (pulso y púa o cuerda pulsada) con la intención de que
instrumentos autóctonos, tan nuestros como la bandurria y el laúd tengan un sitio de honor
en las Escuelas de Música y Conservatorios de la Comunidad Foral de Navarra.
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